A menos de un mes de la segunda vuelta presidencial, Jeannette Jara intensificó su campaña con un simbólico despliegue en La Pintana, una comuna históricamente postergada que ahora se convierte en escenario clave en la disputa por el voto popular. Acompañada por la alcaldesa Claudia Pizarro, la candidata oficialista inició este lunes una fase de campaña centrada en la seguridad ciudadana y en cortejar al electorado del Partido de la Gente (PDG), decisivo tras la primera vuelta.
La estrategia recuerda el recorrido de Gabriel Boric en 2021, quien también eligió La Pintana como punto de partida para una campaña de segunda vuelta enfocada en propuestas concretas. En esta ocasión, Jara busca instalar un mensaje claro: seguridad, presencia en el territorio y respuestas prácticas, dejando atrás los discursos simbólicos que suelen marcar las primeras etapas de las campañas.
Otro de los objetivos prioritarios es conquistar los votos que obtuvo Franco Parisi, cuya campaña tuvo uno de sus actos principales precisamente en La Pintana. Desde el oficialismo, representantes como Constanza Martínez (FA) y Lautaro Carmona (PC) han señalado la importancia de ofrecer propuestas reales y verificables a este electorado, al que califican como crítico, pero abierto al diálogo.
A pesar de no alcanzar el 30% en primera vuelta —un resultado considerado bajo por el oficialismo—, el equipo de Jara descarta una reconfiguración total de la estrategia. La apuesta está en reforzar la presencia en medios, especialmente matinales y espacios digitales, y destacar en los debates con José Antonio Kast, donde Jara planea “exponer, defender y confrontar” su visión de país en materia de seguridad, justicia social y gobernabilidad.