La Organización Internacional del Trabajo (OIT) reveló que la pandemia del Covid-19, hizo que la cifra de jóvenes de entre 15 y 24 años, que no trabaja ni estudia, sea la más alta registrada en los últimos 15 años.
En concreto, según los últimos reportes, la cantidad de jóvenes desempleados o que no estudian en 2020, fue de un 23,3%, un 1,5% más que en 2019. Mientras que la tasa global de desempleo juvenil llegó al 15,6% en 2021.
Dada esta situación, desde la organización proyectaron que “la situación mejorará ligeramente”, mientras que la cifra de jóvenes sin empleo disminuirá en dos millones a finales del 2022, correspondiente al 14,9%.
Esto podría concretarse con la creación de hasta 8,4 millones de nuevos empleos para jóvenes de este rango etario. Sin embargo, de igual forma habrá más de 6 millones de desempleados.
Sobre las áreas que eventualmente podrían aumentar sus oportunidades laborales, están la sanidad y educación. A su vez, se espera que para el 2030, se creen 17,9 millones de empleos adicionales, si ambos sectores dirigieran correctamente los recursos recaudados.