Lauren Kay Dean, mujer de 28 años, fue sentenciada a cadena perpetua en Texas, Estados Unidos. Esto último tras dejar morir a su hija con Síndrome de Down en 2020.
La imputada prefirió irse a bailar y a consumir alcohol con sus amigos, pese a que a la menor de 7 años necesitaba atención especial las 24 horas, ya que incluso tenía una parálisis cerebral.
Además de la pequeña fallecida, Lauren Kay tenía otros dos hijos de cinco años y tres meses de edad.
Al llegar a la casa y ante la presencia de autoridades policiales, encontró a la pequeña muerta producto de que estuvo varias horas sin atención. Cabe mencionar que ella necesitaba alimentarse por medio de sondas, entre otros cuidados prioritarios.
De esta manera, a la mujer se le condenó a cadena perpetua por los delitos de homicidio en segundo grado contra menor de 10 años, abandono y poner en peligro a un niño.